Lamí la sal de tus pechos, retoños envilecidos con el tiempo, te armé de margaritas mi sustento, me entregué a lo profundo de tus sabores, mares salobregos de encanto, con gemidos te recorrí entera, como animal salvaje en su madriguera me tomaste cual presa intrusa y te ame, de mi gruta derramé la savia dulce néctar cristalino que bebiste entre suspiros, fiera hambrienta me deboras, con tus dedos, con tu lengua de serpiente me tomaste toda. hasta el sudor de mis pechos te bebiste en luna llena, y te me diste toda toda.
Sin temor y sin reservas te hice mía despierta y dormida, mientras juntamos las noche con el día.
Hoy te espero fiera, me harás más tuya de nuevo con tu mirada fija en la mia mientras dura nuestro interminable orgasmo.
Yess...
Sin temor y sin reservas te hice mía despierta y dormida, mientras juntamos las noche con el día.
Hoy te espero fiera, me harás más tuya de nuevo con tu mirada fija en la mia mientras dura nuestro interminable orgasmo.
Yess...